Increíblemente los bits como unidades mínimas de almacenamiento, generadas por pequeños impulsos de electricidad mantienen toda la civilización moderna, no podría ser más paradógico el uso de el sistema binario en la computación con las decisiones humanas de las cuales tomamos día a día.
Un sí o un no para nuestras micro decisiones, no podría ser más banal su uso dado que cada situación a la que nos enfrentamos, muchas veces no puede considerarse como un sistema dual de estar o no en lo correcto.
Existen tantas tonalidades que pareciera que tenemos que sumar bytes consecutivamente para contar con una mayor gama de encontrar todas las diferentes puntos de vista de cada situación.
No seremos capaces de encontrar una solución si en la banalidad del día a día nos consideramos como parte de un sistema binario básico, mejor aun somos parte de una tonalidad inmensa de variantes que podría considerarse casi infinito.
Como es posible que cada uno de nosotros pueda interpretar la realidad como algo distinto en cada uno de los pensamientos que por más que seamos en cantidad, pareciera que nunca se repite la individualidad de cada uno de nosotros.
Vivamos identificar las tonalidades y sepamos que durante el tiempo siempre vamos a cambiar porque somos seres en constante evolución.
07122020